LÁSER

Laserterápia

El láser se utiliza en la recuperación de lesiones desde hace varios años, bajo el denominador de laserterapia, pero las técnicas de tratamiento han experimentado una revolución hace relativamente poco, con un cambio que es más cualitativo que cuantitativo. Se trata del uso del láser de alta intensidad en fisioterapia, que cambia absolutamente las posibilidades de aplicación.

En la Clínica MCD disponemos de dos tpos de láser uno con puntero y uno inhalámbrico, que implica enviar un rayo electromagnético a una zona determinada del cuerpo humano, en este caso con fines terapéuticos. La laserterapia actúa sobre las células bajo los principios de la bioestimulación y la estimulación fotomecánica.

La llegada del láser de alta intensidad al sector de la electroterapia avanzada ha multiplicado los efectos positivos de la laserterapia. Equipos como los que disponemos en la Clínica MCD, pueden utilizarse con distintas longitudes de onda y, por tanto, con un rango mayor de alcance y penetración en los tejidos.

Indicaciones: Lesiones musculares, tendinopatías, cicatrices, artrosis, lumbalgias, capsulitis, bursitis, fascitis plantar.

Ventajas de la terapia láser

El láser de alta intensidad proporciona ventajas evidentes porque mitiga el dolor inherente al tratamiento, rebaja inflamación y mejora la cicatrización, ayudando con los efectos bioquímicos, según explica Toral.

La terapia con láser es indolora y, aunque se nota un aumento de temperatura en la zona tratada, no es invasiva, y proporciona los siguientes efectos fisiológicos:

  • Aumenta la actividad metabólica al actuar sobre las mitocondrias. Esto puede reducir
    los tiempos de curación.
  • Se produce un aumento de la vasodilatación.
  • Acelera la cicatrización y regeneración.
  • Mejora el drenaje linfático.
  • Reduce la inflamación.
  • Aumenta el umbral del dolor. La estimulación fotomecánica inhibe la sensación de dolor y proporciona alivio inmediato.

Ventajas de la terapia láser

El láser de alta intensidad proporciona ventajas evidentes porque mitiga el dolor inherente al tratamiento, rebaja inflamación y mejora la cicatrización, ayudando con los efectos bioquímicos, según explica Toral.

La terapia con láser es indolora y, aunque se nota un aumento de temperatura en la zona tratada, no es invasiva, y proporciona los siguientes efectos fisiológicos:

  • Aumenta la actividad metabólica al actuar sobre las mitocondrias. Esto puede reducir
    los tiempos de curación.
  • Se produce un aumento de la vasodilatación.
  • Acelera la cicatrización y regeneración.
  • Mejora el drenaje linfático.
  • Reduce la inflamación.
  • Aumenta el umbral del dolor. La estimulación fotomecánica inhibe la sensación de dolor y proporciona alivio inmediato.